28 abril 2014 | Proyectos Internacionales

La primavera ventolera

Me imagino que todos y todas recordaréis de vuestros años en la escuela aquella tan célebre definición mil y una veces repetida; ¿qué es el viento?, es el aire en movimiento. Pues bien, yo a eso añadiría, que es Dinamarca en estado puro. Los primeros rayos de sol comienzan a asomar, las flores de todos los colores empiezan a brotar y los pajarillos con sus tímidos cantos amenizan la entrada de la primavera, que en este caso y aún a mediados de Abril es más un estado anímico (i am happy, como la peña ovetense de el video ese que anda rulando por las redes sociales), que una realidad meteorológica. Sí es cierto que en lo que va de Abril, nada de aguas mil, apenas unas decenas, a lo sumo. Pero este dichoso viento…

Sea como fuere, creo que si estamos en condiciones de afirmar que el tan temido frío invierno danés ha expirado. ¡Y lo he superado con nota! No pretendo pecar de fanfarrón, sino que ciertamente y corroborado por los más viejos del lugar, ha sido uno de los más suaves de los últimos años.

Y así que a pesar de la susodicha brisa norteña, las cosas al aire libre han seguido su curso, es decir, mucho paseo por bosques y playas, mucha bici y desde hace un mes, vuelta a los campos de fútbol.

En lo que respecta al desarrollo del proyecto y mi trabajo en la Hojskole, la verdad que estoy encantado. Tanto es así, que ya puedo anunciar (tras la pertinente aprobación de la Agencia Nacional Danesa de la extensión) que continuaré con éste hasta principios de Agosto, agotando los 12 meses máximos permitidos de EVS. Dejar este país a mediados de Junio, a las puertas del tan ansiado verano y con mucho trabajo que hacer incluso en esa época estival no me parecía adecuado.

Cómo decía estoy muy feliz aquí. Muchos días me acuesto pensando en la suerte que he tenido al encontrar este proyecto, por lo que me está aportando y permitiendo vivir. Buena parte de culpa de que me encuentre tan a gusto es también de mis compañeros, (un voluntario italiano y otro español) y del staff de la escuela.

Si bien, y como tantas otras cosas en la vida, cuánto más en profundidad conoces algo, mayor es la amplitud con que puedes observarlo, y se puede apreciar que no es oro todo lo que reluce. Pero esto ya es otro tema, ya que entraríamos en el terreno de las percepciones personales, divagaciones existenciales y demás comidas de tarro mías que requerirían ser tratadas largo y tendido.

De este modo y como decía antes, sinceramente estoy muy satisfecho con mi trabajo aquí. Asimismo me lo han hecho saber desde la escuela en los incontables meetings que aquí se llevan a cabo. Y es que ganas de trabajar e ilusión no me están faltando. Buen ejemplo de ello es que paulatinamente ha ido aumentando la carga y responsabilidad del trabajo que se nos asigna. Ojito, que ha habido semanas que hemos terminado al límite (risas). No, pero hablando en serio, se aprecia que desde la escuela se confía en nosotros y se nos valora, y eso es la mar de reconfortante.

A las clases de deportes y actividades de libre, así como fitness and jogging, se han unido este periodo las de escalada en el rocódromo de la escuela ( a un nivel muy básico, no se vayan a pensar…) y una que me ha llenado especialmente y que ha sido un auténtico placer impartir con Víctor, el otro EVS de La Mancha, que hemos venido llamando algo así como teambuilding e interculturalidad. Sin ser un experto ni mucho menos en la materia, ha sido una experiencia preciosa para mí, así como un reto muy bonito de afrontar y un buen ejemplo de esa confianza que cómo os comentaba desde la escuela se tiene en nosotros.

Algunos de los conceptos que hemos trabajado han sido la interculturalidad (realidad absoluta en este espacio), la cohesión grupal, la importancia y diversos elementos de la comunicación, la autoestima y la confianza en un@ mism@, o la resolución de conflictos.

En este punto es donde se me hace imprescindible dar las gracias a todas las personas o colectivos que me han enseñado, que me han aportado o inspirado para poder llevar a cabo estos talleres con los que tanto he disfrutado y he aprendido (y lo que me queda de esto último!!). Simone y Rebeca de Youropía, queridas Yetoponesianas, gente de Los Glayu, muchísimas gracias.

Una actividad puntual que realizamos hace dos semanas y me apetecía comentaros fue la presentación sobre España que nos tocó desarrollar dentro de las célebres Noches Culturales que los martes tienen lugar en la escuela. Al proceder tanto Víctor como yo de luagres tan dispares (él se crió en La Mancha y vive desde hace tiempo en Málaga), decidimos hacer una introducción histórica titulada «España; historia de un país en permanente crisis». El porqué, es que no se puede explicar el presente sin conocer el pasado. Cuando llegamos a la parte que engloba nuestros días y la situación actual del país, las caras de asombro entre los y las asistentes eran para enmarcar. Pero…¿y el flamenco?, ¿y la paella?, ¿y los toros?, ¿y el sol?. Tras nuestros testimonios y una serie de videos, fotos y documentos, la pregunta era unánime; ¿de veras eso está ocurriendo allí? Lamentablemente, sí. Eso sí, parte de los y las allí congregados y congregadas habían oído de esos problemas en televisiones, periódicos, internet. Lo que no conocían tanto (¿a quién sorprende?), son las distintas luchas que en muchos ámbitos y desde abajo se están desarrollando en todo el estado intentando cambiar las cosas, por completo y para siempre. Por supuesto también hubo tiempo para resaltar lo bonito de nuestras tierras, en mi caso Asturies, y aquello que yo tanto echo de menos, veáse paisaxes, sidres, fartures, gaiteraes y por supuesto y ante todo familia y collacios. Y de postre unas torrijas o en Asturies llamadas picatostes, que ya de fabes quedaron fartucos la vez anterior.

Y por último, recomendaros encarecidamente Copenhaguen. ¡Qué ciudad! A mi no me resulta sencillo (temas de curro en la escuela y demás) ir tan a menudo como me gustaría, pero es una pasada. Así que el que tenga oportunidad, no deje de hacerlo.

Un abrazo muy fuerte a tod@s y como dirían desde aquí para despedirse en estos casos,

MED VENLIG HILSEN!

P.D. En cuanto al idioma, sigo como el primer día. Finalmente opté por no apuntarme a las clases ya que me quitaban mucho tiempo de la escuela, y no le veía mucho futuro…

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